jueves

Entrenamiento Emocional en Kairos



La familia como eje del desarrollo humano se instaura sobre el concepto que los padres permiten una serie de condiciones afectivas, económicas y sociales para el sano desarrollo de sus hijos, sin embargo las condiciones de nuestro entorno en Colombia bien sabemos que ponen sobre tela de juicio que los padres desarrollen este trabajo de modo competente. Iniciando por las condiciones económicas que no permiten que gran parte de nuestra población tenga en sus hogares las condiciones deseables o mínimas donde sean satisfechas las necesidades básicas, pasando a condiciones sociales donde las relaciones y el capital social de los padres no representa mayores oportunidades para sí mismos ni para sus hijos y finalmente, las afectivas donde la incipiente y casi nula educación emocional que recibimos, atado a condiciones culturales de discriminación, machismo y subdesarrollo, sostienen prácticas donde lo afectivo y emocional pierde valor o no se entiende, evidenciando que los padres carecen regularmente, de las herramientas adecuadas para proveer lo mínimo vital en sus hijos. Sabemos que debemos darles amor, pero ¿Qué es amor?

Al final cada familia soluciona según lo vivido anteriormente y el círculo continúa repitiéndose.

Lo que evidencian nuestros entornos familiares, indican que no es un buen camino el que aquí seguimos. Nos enseñan tantas cosas pero nadie nos enseña a SER HUMANOS.

Este último concepto se hace más atento y profundo en cuanto se trabajan sobre las propias condiciones afectivas, que instauran la emoción como el detonante. La emoción se refiere a “energía en movimiento”, ¿por qué se producen los movimientos?, ¿dónde y cómo crece el miedo en un persona? ¿la rabia? ¿la tristeza o la alegría?. Habitualmente no tenemos acceso a formación sobre éstas preguntas.

Las emociones determinan en gran parte la estabilidad de un ser humano y sus acciones de acuerdo a como éste aprende a “canalizar” dichos movimientos. Como un ejemplo promedio podemos tomar las acciones violentas; en los hombres la violencia se asocia a un miedo no consiente que convierte en odio y que materializa en la destrucción total o parcial, de quien en él desata el miedo o el odio. En la mujer ser agresiva la hace menos femenina por lo que ella misma se regula con mayor éxito que el hombre, sin embargo, al no afrontar su deseo de agredir lo convierte en tristeza y se victimiza para desde allí ejercer poder sobre otros. Este ejemplo es común en contextos latinoamericanos y tristemente frecuente en condiciones de vulnerabilidad.

Estas personas toman decisiones sobre sus emociones, el hombre regularmente canaliza su miedo a la rabia para parecer valiente y la mujer canaliza su agresividad a la sumisión para parecer femenina: lo aprendieron y creen que así es y seguirá siendo, lo hacen porque creen que TODOS lo hacen así y los más complejo es que en la mayoría de casos no son conscientes de que eso les pasa. Una muestra más de analfabetismo emocional.

Programas que trabajan las problemáticas anteriormente descritas son implementadas en los espacios escolares en varias ciudades del mundo con éxito. El programa PATHS, por ejemplo, enseña a niños de edades tempranas a identificar y canalizar sus emociones disminuyendo los conflictos y la agresividad en las escuelas, otros más muestran el camino sobre cómo debemos educar en estas líneas y el interés de países desarrollados (Estados Unidos, Inglaterra, Francia) y de algunas de las mejores universidades del mundo (Oxford – Harvard) evidencian lo importante del tema. Kairos presenta EntrenomocioN.

La familia es el recinto sagrado para aprender sobre mí mismo, y es la emoción el vínculo con nuestro mundo interior. Sin embargo no hemos sido educados en ello, los padres no poseen las herramientas para ayudar a los hijos a mirarse y ver el potencial que tienen, mirar sus principios y donde sienten que hacen lo correcto, o donde se equivocan, auto observar lo que sienten que es valioso para cada uno y que se convertirá en sus valores personales, lo que se mueve dentro de ellos y los hace especiales, auto observar sus propios dones que son el motor de lo que podrán aportar a la sociedad. Estos padres no son alfabetos emocionalmente y están incapacitados para enseñar a sus hijos un lenguaje que no conocen.

Así la felicidad, que es una construcción de dignidad en de vida y un derecho y deber de todo ser humano, exige la comprensión de la propia experiencia por medio de los sentimientos y emociones. Ante un mundo sensible que no se conoce y termina siendo ridiculizado, la felicidad se convierte en nuestra sociedad en un sueño inalcanzable, donde “realidades” como la violencia, los padres ausentes, los no cuidadores y el tener hijos no deseados parecen construir un muro entre lo deseable y lo real.

No podemos ser felices porque somos incapaces de saber que da sentido a nuestra vida dándonos plenitud y remplazamos su búsqueda por cosas que nos venden en el mercado.

Sin embargo el camino puede ser mucho más corto de lo que intuimos, si las emociones empiezan a ser instrumentos que me dan información para tomar las decisiones correctas, si nuestras comunidades inician un entrenamiento donde es válido sentir y decidir desde lo que la persona siente, se abre la gran promesa donde las personas podrán quedar mal ante otros pero no ante sí mismos, podrán mentir a otros pero no a sí mismos y ello nos hará más responsables con nosotros y lo que hemos decidido amar: nuestra familia.

No es corto el camino, pero tampoco es imposible caminarlo.

EntrenomocioN iniciará este año en Medellín en concurso con la secretaria de Educación y el Centro de Fe y Culturas y esperamos donde invitaremos cerca de 700 personas a realizar una divertida experiencia de Alfabetización Emocional.

Bienvenido EntrenomocioN!

domingo

Ser o estar...

Quiero compartirles algunos apartes del libro, creo que sus comentarios son muy buenos para mi... un almazo grande.

De la introducción:

¡Si usted me dice que no soy pobre, usted no tiene ni idea de que es pobreza! Me grito totalmente descompuesto Rubén, me va a decir que no soy pobre cuando no tengo comida!? cuando tuve que vender la pipeta del gas para pagar el arriendo el mes pasado y ahora no tengo donde cocinar?! Si no tengo trabajo porque estoy inválido?! Si no tengo con que despinchar mi bicicleta?! Usted no sabe! usted no es pobre! Usted no sabe de pobreza!

Varias semanas de un trabajo de formación secuencial y profundo lo enfrentaban con una posible paradoja: ¿si tengo tanto porque soy pobre? Rubén vive en un asentamiento de los llamados cinturones de miseria en Cali, Colombia. Hace unos años sufrió un accidente en una moto que le deformó una de sus piernas y a partir de allí no ha podido conseguir quien le de trabajo, vive con su pareja, una señora mayor que él y tampoco trabaja fijo, lleva poco dinero a casa. Rubén se trasporta en una bicicleta por entre el valle y la montaña de esta hermosa ciudad, pedalea a diario buscando oportunidades para él y por su búsqueda llegó a la casa de la fundación donde le ofrecieron entrar en este proceso de formación. Si bien tenía que llegar a las 7 de la mañana todos los días Rubén fue uno de los mas puntuales en el proceso y aun cuando debieran correr o permanecer de pie mucho tiempo, Rubén lo hacía siempre con una sonrisa en el rostro (salvo que llegarán los dueños de la fundación donde afilaba un rostro triste con mirada baja) promovía movimiento, inquietaba, discutía y generaba discordia en el grupo. Opinaba con libertad de lo que pensaba y nunca se quedo callado en las oportunidades que se le presentaron aun cuando muchos dentro del grupo lo desearan. Por ello grito con fuerza cuando les rete: Luego de lo que he contemplado de ustedes esta semana, si alguno de ustedes dentro de 5 días puede convencerme que es pobre yo me retiro de mi proyecto de vida en la educación y le doy lo que me pida!.

En algo tenia razón Rubén yo no sabía de pobreza por haberla estudiado, yo la había vivido… pero nunca me di cuenta.

Tal vez debí mencionarle a Rubén que me acosté con hambre algunas noches, que mi educación media la debió pagar un familiar y no tenía tampoco dinero para la universidad. Debí contarle de Ana Bolena mi hermana mayor vive hoy en día en la calle del rebusque y que hace años no se de ella porque eligió su condición de drogadicción y no a sus tres hermosos hijos o hacer énfasis en las lagrimas de mis padres por ella. Tal vez si le dijera que trabajé 11 años para pagarme mi educación superior y que durante esos años mi jornada era de 18 horas diarias entre trabajo y estudio, tal vez si le contara las cosas tristes de mi vida que lo conmovieran, los asesinatos de mis amigos, la muerte de mi novia y pusiera un rostro triste y bajara la mirada pidiendo compasión lograría que su argumento no me distanciara de él y del reto al que lo empujaba.

Sin embargo sería tiempo perdido, yo vestía bien, tenía trabajo y era el jefe de un equipo de facilitadores, mi rostro expresaba el orgullo de realizar mi trabajo, de lejos les dejaba claro que me sentía exitoso en lo que hacía y llegaba todas las mañanas en mi carro nuevo y no en bicicleta. Para él no tengo derecho a hablar de pobreza.

Enfrentar ese momento haría que se desatara en él y en el grupo lo que llamaré la revolución del pensamiento del pobre. Un proceso difícil y bello, lleno de emotivos encuentros y trampas sin salida.

¿Qué es y cómo es el pensamiento del pobre?

Cada tanto las miradas del grupo intentan adivinar a donde quiero llevar el proceso, algunos por supuesto ya lo saben y sonríen confrontados amorosamente. ¿Quién te dijo que eres pobre?, ¿qué significa para ti ser pobre?, ¿qué hacen los pobres, cómo es su vida?, ¿qué serias si no fueras pobre?... ¿o rico? ¿o clase media?.

Con el pasar de los días se ven las claridades, la pobreza es una excusa para muchos de ellos, la pobreza es su escudo para protegerse de la exigencia de la vida, la pobreza es una coraza pesada que les impide alcanzar sus propios sueños. ¿Quién te dijo que eras pobre? Mis amigos, mis vecinos, en la tele, mis padres, los señores que vinieron aquella vez a ayudarnos… todos lo dicen.

La pobreza se convertía en sus cabezas como un yunque torpe, un paradigma del que pareciera no quisieran desprenderse. Explícanos, indague en Cristian, como es que ese familiar tuyo que a la semana gana entre uno y dos salarios mínimos mes, (es decir cerca de 7 a 8 salarios mínimos al mes) es pobre? La respuesta es clara “mi tío no está conforme si llega a su casa con menos de $700.000 pesos a la semana (eso es cerca de dos salarios mínimos al momento de el taller) pero se lo gasta en sus tres esposas y bebiendo el fin de semana por eso no le alcanza”. Generosamente Cristian ilustraba con su familia de lo que hablábamos… ¿dónde está la pobreza del tío?

Existían muchos otros ejemplos de real escases, personas con meses sin trabajar buscando frecuentemente ocuparse en algo, madres con niños que no alimentan adecuadamente, casas con todas las condiciones de miseria y personas sin facilidades para educación, salud o servicios básicos, todas esas imágenes que les encanta a algunos medios de comunicación. Sin embargo allí mismo estaban estos jóvenes y muchos otros mostrando una alternativa diferente.

El factor diferenciador para mi, es aquel que tenia a la pobreza como un factor que lo definiese a si mismo, o aquel que solo pensaba que era un momento por el que pasaría. ¿Yo soy Pobre o yo estoy pasando por un momento de pobreza?. En su respuesta, su destino.

Decisiones





Un momento que quiero dedicar a mi sobrino, un Ser Humano hermoso que ha tenido una semana muy difícil. Se equivocó como muchos de nosotros y ahora quiero que se centre en recordar quién ha sido, pues para que otra cosa es la familia sino para amar y apoyar, principalmente en los momentos más duros de la vida: Para él este escrito con mi Corazón, a quienes les resulte útil envienlo a quienes se han equivocado y piensen con ello, quienes son a partir de nuestra libertad de decidir:

C.A.B.A.

Decisiones

Para Caturro de tu Tío y Hermano

Una decisión siempre te lleva a algo, solemos decidir sin pensar mucho que comemos, que hacemos en un día o quiénes son los amigos, decidimos si festejamos en lugares inapropiados, decidimos si tomamos riesgos y en ocasiones no entendemos como un amigo nuevo, una novia, o un nuevo trabajo nos cambiará la vida. Tu Catu también decides todo esto.

Las decisiones siempre te dan y siempre te quitan, pero solemos pensar solo en lo que vamos a ganar: me gusta un ejemplo para explicarlo, si yo te dijera que te puedes llevar un millón de dólares ya y no pasara nada sería muy fácil decidir llevarlos pero, si yo te dijera que te puedes llevar un millón de dólares y me tienes que dejar tu brazo derecho a cambio… seguro que ya lo pensarías. Bien Catu, las decisiones siempre nos quitan algo, enamorarse de una mujer y decidir estar con ella es renunciar a otras muchas, decidir un trabajo es renunciar a otras posibilidades de ser y hacer, elegir estudiar es renunciar a tiempo de ocio. Toda decisión trae pérdidas, la mayoría de personas no piensan en perder, solo en ganar y saber decidir incluye estar preparado para perder. Viejo, esa es una de las lecciones que estás viviendo: perdiste.

Sin embargo perder no es tan malo.

Los seres humanos podemos decidir sobre las cosas que hacemos, sobre las que tenemos y sobre las que somos y sentimos. Es fácil pensar que podemos decidir sobre las cosas que hacemos y debes pensar en ello a cada hora… “si yo no me hubiera hecho ese viaje no habría perdido…”, es fácil pensar que decidimos sobre lo que tenemos y seguro también has pensado… “si yo no tuviera que pagar este carro que tengo, tendría dinero para… “. Las cosas y las acciones son fáciles de entender que podemos decidir, sin embargo Catu, pocos de nosotros entendemos que podemos decidir como sentirnos: a eso le llamamos ACTITUD.

Quien escoge una actitud de victima decide “libremente” sentirse menos que los demás, sentirse en desventaja, sentirse triste y vulnerable. Quien escoge una actitud de salvador decide sentirse cargado con los problemas de otros, sentirse responsable, sentirse en ocasiones sofocado por las responsabilidades de otros. Quien escoge una actitud de Juez, libremente decide sentirse bueno, justo y cree que lo que hace esta bien, así se equivoque, el juez dicta la ley aún cuando en casa no la cumpla.

Yo te quiero recordar cuál ha sido tu actitud toda la vida: Tú te comportas como un líder.

Los líderes escogemos sentirnos a gusto con nosotros mismos y nos sentimos orgullosos aún cuando sabemos que cometemos muchos errores y gruesos como este caso, esos errores nos transforman en seres más completos, más nobles, más fuertes, más grandes. El líder escoge sentirse elegido para ayudar, no porque siempre quiera ayudar sino porque él se siente elegido, se siente fuerte, se siente en el lugar y momento adecuado para liderar algo. Tu, por tus elecciones, estas en un momento y en un lugar y cuando te des cuenta, podrás liderar por lo menos un grupo de lectura para esta carta.

En la cárcel, las personas creen que deben dejar de hacer cosas malas, pero mi experiencia me dice que en la cárcel triunfan los que entrenan su actitud para ser mejores. Puedes escoger sentirte “de muerte” por unos días mientras entiendes todo lo que perdiste, pero como en el futbol, siempre habrá un próximo juego y en ese podrás ganar, has perdido un partido, uno que te parece que te deja sin posibilidades del título, pero no creas esa estupidez, tienes con que llevarte el título: ¿no crees? ¿te recuerdo tu Actitud en la vida?, tú te fuiste a los 14 a trabajar porque querías algo mejor y lo lograste; tu molesto con Ana Bolena y con mis padres decides libremente hacerte cargo de tus hermanos y lo lograste; tú has decidido siempre hacerte cargo y ser el líder, decides ser un buen Padre para Laura Sofía y hasta ahora lo has sido, ¿o no eras un líder en tu trabajo? ¿o no eras un líder con tus amigos? ¿ o no eras un líder en nuestro hogar? : Eres un ganador y tendrás el titulo al final del torneo, pero tienes que entender porque perdiste este partido, ¿qué fallo? y créeme que no falló la entrega de la marihuana, fallaron tus principios y tus valores, fallo tu actitud de líder y te convertiste en un peón de alguien que está en su casa libre y escogiendo sentirse un delincuente. Ahora tendrás que entrenar duro para no perder otro partido, ¿Quién ganó entonces este partido? Yo me atrevo a decir que tu lado oscuro gano, todos tenemos un lado oscuro que debemos conocer, aceptar y aprender a mantener controlado. El lado oscuro te gano y ahora quiere quitarte el título completo, ahora tu lo sientes fuerte, lo ves en todo lado, te sientes sucio y malo seguramente, pero OJO: Tú no eres solo tu lado oscuro, solo que ahora está celebrando y por eso te sientes débil.

· Tú no eres un delincuente: cometiste un delito, eso es diferente.

· Tú no eres malo: te sientes mal con los que amas, eso es diferente.

Ahora Catu, la capacidad de decidir nos hace libres. Eso no te lo pueden quitar; el estado y la sociedad, representada en los jueces ha visto que eres peligroso para otros y te han quitado la libertad de ir de un lugar a otro, pero eres libre de otras muchas cosas. Eres libre de pensar y entrenar tu inteligencia como quien Estudia, eres libre de amar y perdonar, de perdonarte y entenderte y relacionarte bien con otros seres que habitan en ese patio, tal vez Dios te pide que lleves tu risa, tu liderazgo y tu buena energía a ese lugar donde estas, tal vez allí tienes una misión humanitaria, tal vez fuiste a aprender pero también a enseñar algo a la gente de ese patio: Piensa, muchos pueden estar en tu misma situación.

Si no te pueden quitar todas esas libertades tampoco te pueden quitar “La dignidad”. La dignidad es el valor que tiene cada ser humano por el solo hecho de ser humano, puedes vivir en espacios y en condiciones poco cómodas pero eso NO TE QUITA VALOR. Como quien vive en una humilde vivienda no tiene menos valor que quien vive en la mansión. Ahora tendrás que entender que vales por lo que eres y no por lo que tienes, allá adentro no es lo que tienes, es lo que eres. La Dignidad nos da el sentido puesto que de acuerdo a lo que sabemos que valemos establecemos que deseamos tener y hacer, e insisto: Tú eres un líder.

Ahora debes seguir decidiendo en tu momento difícil, debes decidir cómo vivir en la cárcel pues vas a vivir allá un tiempo, se que no quieres pero en la vida no es solo lo que tu quieres: Yo no quise que muriera Laura, o que asesinaran a Jorge o quebrar la empresa o que Ana Bolena decidiera irse. No es lo que tú quieras, es lo que la vida te pone puesto que son decisiones de otros: Tu oportunidad es decidir con lo que la vida te pone. En este caso es decisión de los jueces que creen (dado que no te conocen) que tu eres un peligro. ¿Quién eres en la cárcel? Yo creo que tu serás el preso con el que se puede hablar, el que hace reuniones para contar chistes en una esquina y se inventa cosas para hacer y pasar el día, el que busca como crecer, que se hace amigo de los guardias con la misma paz que de los compañeros, el que puede hablar en nombre de otros. El que se hace amigos y se cuida de aquellos a los que su propia sombra ya les ganó el partido. ¿Cómo quieres vivir esta etapa en la cárcel? Esa Caturro, también es tu decisión.

Espero que te levantes un día y escojas vivir 50 años más y demostrarte a ti mismo todo el valor que tienes.

Debes decidir darle el sentido a estar en la cárcel y cuidado: tu propia sombra estará todo el tiempo diciendo que sentido quiere ella, cuídate de los pensamientos negativos, de pensar que no vales, que nunca conseguirás dinero y tranquilidad, que nadie te va a querer… CUIDADO esa sombra puede en cualquier momento hacer que pases de tener la Actitud de un Líder a tener la Actitud de un delincuente. OJO hermano mío OJO. Cuando te sientas tentado te recomiendo un ejercicio: mira al cielo cuando estés en el patio, mira el sol y luego ve tu sombra en el piso, mira toda la luz que hay, mira el fuerte sol, mira como alcanzas a ver todo a distancia por la luz y luego ve tu sombra: veras que es tan pequeña e inofensiva ante la luz, veras que la sombra siempre se arrastra y solo existe si la luz está. Mírala allí en el piso, sonríele, pícale el ojo y dile: no es hacia lo oscuro que me dirijo, ¡yo merezco el sol!

También debes decidir qué tipo de hombre quieres ser en 4 años. Seguro recuperarás tus facultades como ciudadano pleno en ese plazo más o menos. Hermano mío, debes decidir qué tipo de hombre vas a ser y debes pensar en aprovechar este tiempo. Dale gracias a Dios por este tiempo para pensarte (te confieso que temo mucho el destino de la dirección en la que ibas) y decide que hacer, puedes estudiar una carrera y en cuatro años ya casi serías un profesional, puedes estudiar por internet y hacer cursos gratis del Sena, puedes aprender Ingles o Portugués o Alemán y viajar después de este tiempo. Puedes dedicarte a pensar buenos negocios, aprender a administrar, a hacer empresas y convencerme de negocios buenos, puedes aprender sobre el ser humano, aprovechar para perdonar a Ana Bolena, escribir cartas, escuchar algo más que regeton, aprender de las estrellas e invitarnos una noche a que vayamos a acampar con tu hija y los míos en algún momento para que nos cuentes todas las cosas hermosas que aprendiste en 4 años. Pero debes decidir si crees o no crees en el ser humano maravilloso que eres.

Debes decidir en que deseas crecer, en donde no te quieres volver a equivocar: en lo que hagas, en lo que tienes o en lo que eres.

Voy terminando con dos ideas, la primera sobre un libro “El hombre en busca de sentido” de Víctor Frank, este personaje vivió en un campo de concentración en la Segunda Guerra Mundial: su delito, creer en un Dios y ser Judío, por eso lo arrestaron, allí no había comida solo líquidos y solo mantenían vivos a los que eran útiles para trabajos pesados, los viejos y la mayoría de mujeres los enviaban a cámaras de gas donde los asesinaban sin juicios o los fusilaban por desobedecer alguna norma básica. Entenderás que apresaban a las familias enteras que fueran judías y por tanto en muchas ocasiones mataban a tus seres queridos al lado tuyo. No había visitas, ni celulares con minutos para llamar a que me den un aliento. En esas condiciones Víctor se preguntaba porque algunos lograban vivir y otros se dejaban morir… ¿Qué mantenía vivos a los presos en esas condiciones? La respuesta Catu fue contundente, los mantenía vivos un sueño, un propósito que querían cumplir cuando eso acabara, y así les costara la vida, lucharían con todo para darle sentido a su vida: Víctor Frank descubrió también que lo había tenido vivo hasta ese momento, él, se imaginaba dando clases en las universidades y contándole a sus alumnos sobre lo que él había vivido en el campo de concentración. Vio que cada vez que tenía dificultades o riesgo de morir, y sabiendo que su familia ya había sido ejecutada, el siempre pensaba que debía enseñarle a otros sobre lo sucedido para que nunca más se repitiera esto en la historia de la humanidad. El ha cumplido su propósito, logró salir vivo y fue a enseñar en la Universidad.

Tú debes también decidir qué sentido quieres darle a este momento duro: ¿Qué quieres hacer con toda esta experiencia? ¡Así que Construye un sueño! Aférrate a él y empecemos a trabajar por lograrlo en el menor tiempo posible.

Por último quiero hablarte del amor y la presencia. Siempre necesitaré un abrazo tuyo y sabré que tu también lo necesitas, sin embargo por mis decisiones y las tuyas no podremos abrazarnos frecuentemente y tampoco lo podrás hacer con la familia y los amigos. Creemos que lo mejor es que estés en Buga por seguridad y eso pone Kilómetros de distancia entre nuestros hogares. Como los buenos amigos nos despediremos sabiendo que estamos juntos, que cuando necesites algo podrás acudir a cualquiera de nosotros, pero debes acostumbrarte a estar contigo, caerte bien a ti mismo y disfrutar de tu propia compañía. Estamos haciendo lo posible por acompañarte pero no puedo viajar a visitarte todo el tiempo. Mis mejores amigos siempre estuvieron en otras ciudades, los conoces, Memo que vivía en Bogotá porque yo decidí irme a Cali y ahora a Medellín y Julián en Ecuador porque él decidió irse allá. Hoy en día cada vez que podemos nos vemos y celebramos que nos queremos: sin reclamos, sin “me tenés olvidado”, es un grito de alegría “marica que bueno verte”. Asi que Hermano mio No esperes de mi que te tenga LASTIMA, yo TE AMO y no creo que la cárcel te quede grande. Yo tengo un sueño en mi corazón de mi hermano Caturro y de lo que deseo que él sea, así que desde la distancia estaré contigo en cada cosa que necesites, desde lo que puedo y dispongo, pero físicamente no nos veremos mucho: cuando te haga falta cierra los ojos y yo estaré contigo dándote un abrazo, lo lograrás sentir si asi lo decides.

Por lo anterior te invito a que este momento difícil nos haga más cercanos, que me hagas llamadas para que pensemos en las cosas que haremos juntos, en el futuro, en las oportunidades. Invítame a hacer parte de tu vida de la cárcel, no siento vergüenza porque sé que todos nos caemos y de diferentes formas, así que me sigo sintiendo orgulloso de ti, más ahora que tendrás que demostrarnos esa luz que te caracteriza en un lugar oscuro.

Vive la cárcel con felicidad, es decir, dale sentido. Es como un viaje de aventura incomodo que te debe llevar a visitar los lugares más profundos de ti mismo, los más bellos y los más riesgosos. Busca seguir siendo lo que eres y encuentra ese líder para que seas de nuevo tú, aún en la cárcel.

Recuerda leer esta pequeña carta de vez en cuando, repítela y deja que tu corazón tome de ella lo que crea pertinente y si la extravías yo te la haré llegar nuevamente a tu pedido.

Siempre contigo hasta que tu lo decidas.

Tu hermano y Tio

Carlos Andrés

sábado

Pobreza y violencia

Acabo de leer el Blog de Martin Varsavsky uno de esos seres que admiro en su forma de pensar y escribir, y me encuentro con que vivo en el pais más peligroso del mundo de acuerdo a asesinatos y suicidios. (ver blog)
Para los que estamos acostumbrados a vivir en este paraiso ese no es problema ya que es parte del paisaje escuchar estos mensajes sin embargo ello dista mucho de mi dia a dia, tal vez como lo dice uno de mis maestros, "No se donde esta la gente mala en Colombia" y yo concuerdo... vivo rodeado de gente trabajadora y de buen talante, animada y curiosa, creativa y emprendedora.

Asi que sin siquiera intentar desvalorar las estadisticas, mi observación va en la dirección contraria. Tal vez es mejor entender que la violencia solo sustenta el desespero y que no puede haber mayor desespero que el de sentirse sin oportunidades. Ahora que mi pais no tenga oportunidades para la gente es una de las mayores mentiras que se pueda decir, lo que no podemos es hacernos cargo de gente que se cree sin oportunidades... allí estan los violentos. Observen que igualmente tenemos una de las menores tazas de suicidio en este estudio. Aqui vale la pena vivir, solo unos que se creen lo suficientemente pobres para no tener oportunidades dejan que la violencia sea su dueña y señora.

La pobreza esta en quien se siente sin oportunidades y ello en su alma genera violencia.